Multiculturalismo urbano: Lavapiés.

Dentro de la maravilla multicultureta del "prohibido prohibir" sesentayochista aparece la modalidad de degradación urbana estilo Lavapiés.

Lejos de las zarzuelas del barberillo, este barrio es ahora ejemplo del sarao mundial-progresista promocionado otrora por Tierno Galván (Dios le haya perdonado) y ahora por el lloroso y sentimental plantador de árboles de mentira, Ruiz Gallardón.

Resulta que la "deconstrucción social" es un hecho en el Madrid guarro, delictivo y pútrido del nuevo milenio. Así como el insigne Ferrán Adriá "deconstruye" la tortilla de patata para crear una nueva, Gallardón y adláteres "deconstruyen" barrios enteros para crear el hombre nuevo que querían Togliatti y Pol Pot, emulando a san Pablo (sólo que san Pablo no era partidario de la destrucción como pauta ética, ni de la mierda como insignia estética).

Vean, ven lo bonito que queda el Madrid progre-liberal del nuevo Lavapiés. Toda la hez universal unida a un propósito: cuanto más asco, mejor. Si es usted madrileño de los de toda la vida (o sea, de una o dos generaciones o lleva más de quince años en la villa y corte), fastídiese, que Lavapiés es para la chusma y la morisma y punto... en meada estilo libre.

Atención al enlace, amigos multiculturetas:
http://lavapiesolimpico.blogspot.com